Breve manual navideño para padres y tías solteras


Mantenga distancia con los pequeños sin necesidad de darle un zapatillazo

Todos sabemos que llegadas las fiestas, además de venir acompañado de arbolitos y arbolotes, santas falsos en supermercados y comidas extrañas que nadie sabe por qué comemos pero ahí están en la mesa; también tenemos la presencia de unos seres bajitos que parecen personas, caminan en dos patas y están liberados por ausencia de la obligación estudiantil.
Sí, adivinó: se trata de los más pequeños de la casa, esos niñitos que nos traen risas, simpatía; juegos; correrías; gritos; dolores de cabeza y finalmente unas ganas de darle un zapatillazo con la mejor puntería.
Pero a no desesperar y es por eso que aquí le traemos un breve manual instructivo de cómo convivir con esas cosas sin necesidad de emplear la violencia educadora, también llamada “zucundún”, “uno atrás de la oreja” o “simpática patadita”.

Qué hacer
Lo primero es inventar un sitio en una zona de la casa, preferentemente allí donde se encuentran las paredes al que denominaremos “rincón para pensar”, “zona de reclusión” o simplemente “rincón amoroso donde te callas o te reviento”.
Llegado el momento en el que estamos a punto de perder la paciencia mientras pensamos “por qué no lo dejan en la escuela todo el año” y arrojar el primer elemento contundente que tenemos a mano, debemos levantar la mano, elevar el dedo índice y señalando hacia el rincón invitarlo amablemente a recluirse en ese lugar bajo tiernas palabras como “te vas allí o te doy una patada”.
Una vez recluido en ese acogedor ambiente observamos que su piel cacheteril irá pasando del rojo agitado de sus correrías y maldades a un rosadito pálido y finalmente un amarrillín o marroncito (dependiendo del color de piel) colores que nos ayudarán a percibir que es el mejor momento para que vuelva a integrarse al núcleo familiar no sin antes dar didácticos y pedagógicos consejos como “si te portas mal una vez más te reviento”.

Plan B
En caso de no ser aplicable el manual aquí escrito se recomienda pasar al Plan B: un buen zapatillazo y santo remedio.

1 comentario:

No sin Valentina dijo...

...me ha encantado el "zucundun"...ajajjajjjaja...y el rincon amoroso mas castigo parece que apetece...ajajjajja...